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El riego y su tecnificación: esenciales para el sector agroexportador

La gestión del agua para el regadío ha sido, y es, uno de los pilares fundamentales de la política de desarrollo para el sector agropecuario español. Desde la incorporación de España a la Unión Europea, allá por el año 1986, se ha producido un proceso acelerado de modernización del sector agrícola español en el que la implementación de sistemas tecnificados de riego ha jugado un papel clave para el desarrollo de nuestros campos por su capacidad para impulsar la producción sostenible y la diversificación productiva.

Actualmente en España la superficie regada alcanza algo más de 3,8 Millones de hectáreas de las cuales el 77% se corresponden a sistemas de riego localizado y al grupo constituido por aspersión y automotriz. Nuestro Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación estima que del regadío se obtiene el 50% de la producción agraria final en tan solo un 13% de la superficie agrícola, con un valor bruto de la producción anual por hectárea situado entre 2500 y 3000 Euros, lo que equivale a algo más de 6 veces el valor de la producción en secano.

El riego y su tecnificación son esenciales para nuestro sector agroexportador, principalmente focalizado en productos hortofrutícolas, y propician la producción de productos de calidad a precios altamente competitivos en el mercado nacional y en los mercados internacionales. En el caso de las importaciones, nos permiten reducir importaciones de productos deficitarios, como es el maíz. Además, las hectáreas que cuentan con riego tecnificado contribuyen a estabilizar las producciones y los precios agrarios y ayudan a mantener las rentas de las agricultoras y los agricultores, y posibilitan una mayor diversificación de cultivos adaptables a cambios socioeconómicos. Por último, el regadío en España ha contribuido al desarrollo agroindustrial, localizado preferentemente junto a las grandes zonas regables.

Por ello, una buena concepción del regadío y una correcta explotación de su potencial han sido, y son, fundamentales para asegurar tanto la producción agrícola como el desarrollo rural, siendo un medio eficaz para mantener una producción regular en aquellas zonas con cierto déficit de precipitaciones con responsabilidad frente al cambio climático.

Nuestra experiencia en este ámbito motivó al Estado español a contribuir al Proyecto de Irrigación Tecnificada para pequeños y medianos productores y productoras, conocido con el nombre de proyecto PIT, en el que trabajamos estrechamente con las autoridades nacionales, principalmente con el Ministerio de Agricultura, Ganadería y Pesca del Ecuador (MAG), así como con el Banco Mundial, las beneficiarias y los beneficiarios. España participa activamente en la ejecución del PIT con un crédito de 20 millones de dólares a través del Fondo para la Promoción del Desarrollo (FONPRODE). Este instrumento de cooperación facilita la disponibilidad de crédito a condiciones muy favorables, con el fin de impulsar iniciativas que repercutan en el desarrollo de los países. Estos recursos se complementan con el financiamiento del Banco Mundial, a través de un préstamo de 65 millones de euros; con recursos de la República del Ecuador por valor de 16,6 Millones; y, con aportes en mano de obra de las agricultoras y los agricultores por 7.9 millones de dólares. El total del presupuesto del programa asciende a 109,17 millones de dólares. Además, el PIT cuenta fondos de cooperación delegada de la Unión Europea por valor de 8 millones de euros. Con el proyecto PIT también se pone en valor  la promoción de la asociatividad y a la gestión de las Juntas de Riego, a la adaptación del proyecto a los pueblos y nacionalidades indígenas, con un importante enfoque de género y las medidas de protección medioambiental adaptadas a cada subproyecto

Con el esfuerzo y el compromiso entre las autoridades del MAG, el equipo de profesionales de la Subsecretaría de Irrigación Parcelaria Tecnificada y de la Unidad de Gestión del Proyecto y a pesar de todas las dificultades que nos hemos ido encontrando en el camino, estamos haciendo posible la implementación de subproyectos de riego como los inaugurados el pasado 16 de julio en la Parroquia Chugchilan, Cantón Sigchos y en la Parroquia Belisario Quevedo, Cantón Latacunga, Provincia de Cotopaxi, con sistemas que optimizan la gestión del agua y con una mayor y más sostenible producción agrícola que contribuirá a mejorar la calidad de vida:

Subproyecto Guayama San Pedro: Esta obra de riego, abarca más de 99 hectáreas, cuyo costo asciende a cerca de 600.000 dólares y beneficia a 93 familias.

Subproyecto Belisario Quevedo: Más de 57 hectáreas abarca esta obra de riego. El costo del sistema asciende a cerca de 500.000 dólares y beneficia a 109 familias.

El Proyecto de Irrigación Tecnificada para Pequeños y Medianos Productores y Productoras es cofinanciado por el Banco Mundial, el Ministerio de Agricultura y Ganadería del Ecuador, la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), el Fondo para la Promoción del Desarrollo (FONPRODE), la Unión Europea, las beneficiarias y los beneficiarios.

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